Fue precisamente en el Día del Bombero, cuando Héctor Mauricio Véliz fue despedido de sus labores en la Posta Rural de Llico, comuna de Vichuquén, por lo que expresó su malestar en contra de su empleador, el alcalde de Vichuquen Patricio Rivera.
Preocupado por su futuro económico y con ganas de que se haga justicia, Héctor Mauricio Véliz hizo llegar su testimonio a Atentos Chile, para dar a conocer su postura a lo que considera un despido injustificado, pues este se origina tras ausentarse de su jornada laboral para prestar auxilio a los damnificados de Licantén.
Véliz, además de tener cinco años dedicándose a ser bombero, es padre de familia, esposo, técnico en enfermería y estudiante del tercer año de trabajo social. Tiene bajo su responsabilidad la manutención de sus dos hijos, ambos menores de edad,por lo que esta situación le afecta en gran manera.
«Este despido me pilla muy mal ya que al estar contratado a honorarios, no recibo un finiquito y dejo de recibir mi remuneración mensual (…) la situación del despido me ha tenido super bajoneado, ha sido muy lamentable; está la sensación de injusticia, de que se toma una decisión sin darme la posibilidad de defenderme, de saber mi versión», enfatizó.
Según explicó, esta decisión obedece a una orden directa del alcalde de Vichuquen Patricio Rivera, ya que fue avisado de que se le había visto en labores bomberiles en Licantén, lo que no solo habría ocasionado la molestia de sus superiores, sino que también habría generado una ola de comentarios por parte de algunos colegas de trabajo.
«Hubo comentarios, de que había salido de emergencia en otras ocasiones en horarios de trabajo, y es totalmente falso. Solo una vez asistí a una reunión donde se estaba concretando una campaña para conseguir una ambulancia para el cuerpo de bomberos, y yo tenía permiso para asistir y nunca deje mi lugar de trabajo solo, el cuartel de bomberos queda a 200 metros de la posta», detalla.
Añadió que, «El día de la inundación fui a ayudar, los bomberos hemos estado full comprometidos con esta emergencia , poniendo a disposición nuestra energía y pasión por ayudar a la comunidad, eso viene a demostrar y a ratificar mi compromiso con la comunidad y la gente que lo necesita ya que hemos estado desde el día uno ayudando a toda al comunidad licanterina», enfatizó.
«Posible motivo político»
Finalmente, Héctor Véliz calificó la decisión como injusta, por lo que espera que se pueda remediar la situación. «No debería haber terminado así porque no hay motivo sólido, no está claro. No hay un reclamo de algún paciente por alguna mala práctica, es todo muy confuso y creo que esta decisión obedece a temas políticos ya que en mi área bomberil, trabajo con personas que no son muy afines al alcalde y por ahí siento que pude haber algún tipo de represalia», acotó.
Además, mencionó que teme que comience una «persecución laboral» hacia su esposa, la cual ejerce funciones de enfermera en la mencionada posta de salud rural.
Respaldo ante la Ley
El voluntario bomberil apela al Art. 66 de la ley 20907, donde se señala que los trabajadores dependientes regidos por el Código del Trabajo y aquellos regidos por el Estatuto Administrativo contenido en la ley Nº18.834, y por el Estatuto Administrativo para Funcionarios Municipales contenido en la ley Nº 18.883, que se desempeñen adicionalmente como voluntarios del Cuerpo de Bomberos estarán facultados para acudir a llamados de emergencia ante accidentes, incendios u otros siniestros que ocurran durante su jornada laboral.
El artículo además especifica que, el tiempo que estos trabajadores destinen a la atención de estas emergencias será considerado como trabajado para todos los efectos legales, por lo que el empleador no podrá, en ningún caso, calificar esta salida como intempestiva e injustificada para configurar la causal de abandono de trabajo establecida en el artículo 160, número 4, letra a), del Código, o como fundamento de una investigación sumaria o de un sumario administrativo, en su caso.
Según este artículo, el empleador podrá solicitar a la Comandancia de Bomberos respectiva la acreditación de la circunstancia señalada. 
Véliz añadió que, pese a que el pasado 30 de junio vencía su contrato, al igual que el de otros 3 colegas, solo él fue desvinculado del centro de salud, situación que le parece "totalmente injusta".
Por su parte, desde la Dirección de Salud de Vichuquén, a través de las redes sociales emitieron un comunicado, informando que: «Sobre el término de contrato de un funcionario de Posta de Salud Rural Llico, señalar que su contrato a honorarios tenía fecha de caducidad el 30 de junio, lo cual fue informado y que no guarda relación con su funciones como bombero ni los servicios prestados en la comuna de Licanten a raíz de las emergencias contingentes».
