Un caso de vehículos robados desde Chile, que luego fueron donados por el Gobierno boliviano al Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq) en el país vecino salió a la luz este martes.
Al menos así lo informó Hugo Bustos, jefe del Grupo de Búsqueda de Vehículos Robados (GBV) en Chile.
Se trata de la autoridad que dio cuenta del vehículo motorizado robado, el que relacionó con un caso similar ocurrido semanas pasadas.
Según informó Bustos, dirigentes de Conamaq solicitaron informes pormenorizados de otro vehículo bajo sospecha de robo, que también fue entregado a su organización.
Reportes del diario La Razón detallas que poco después de esto se confirmó su procedencia desde Chile.
“Los indígenas campesinos solicitaron a Diprove (Dirección de Prevención del Robo de Vehículos) que les proporcionen un informe del vehículo que lo estaba buscando la víctima de Iquique hace dos años aproximadamente”, dijo Bustos a la red Unitel.
“La víctima también se enteró por la prensa, me mandó una captura de pantalla. Solicitaron el informe y salió que era robado”, agregó.
El primer vehículo que se comprobó era hurtado destapó un escándalo, después que el presidente Luis Arce lo entregara el pasado 27 de marzo.
Era una camioneta Toyota de color negro, que más tarde se supo que fue robada a una mujer en Chile.
“Se envió toda la documentación y se puede decir que el vehículo es 100% robado; no hay cómo cuestionar eso”, acotó Bustos sobre el vehículo Toyota.
A la dueña se lo robaron en 2018 luego de un asalto a mano armada y durante una agresiva encerrona.
Ahora, la propietaria se encuentra hospitalizada por una operación por cáncer.Conamaq lo devolvió a las autoridades chilenas y pidió más detalles del hecho.
El segundo vehículo motorizado es un Suzuki Swift en tonalidad blanca, que también fue registrado como desaparecido hace dos años en la ciudad de Iquique.