La semana pasada Irina Karamanos (33, Convergencia Social, pareja del Presidente Gabriel Boric) viajó a España para participar en el Encuentro Internacional Feminista de Madrid, organizado por el Ministerio de la Igualdad del país europeo. Lo que la cientista social dijo en el conversatorio “Feminismo y mujeres en la disputa del poder” se reprodujo en la prensa nacional despertando de inmediato las críticas desde diversos sectores de la opinión pública.
En el foro la excoordinadora sociocultural de la presidencia atribuyó a “una campaña del terror en donde se te dice que lo poco que tienes se te va a quitar” al triunfo del Rechazo en el Plebiscito del 4 de septiembre del año pasado.
“Las campañas de miedo, de odio, de fomento a la discriminación de ciertos segmentos de la población; la no propuesta, por cierto, al permanente desmarcamiento para no poder seguir avanzando en derechos, pero también la amenaza de que te van a quitar lo que tienes es, por ejemplo, lo que generó el éxito del Rechazo en el Plebiscito”, señaló entonces.
Contactada por DF MAS para referirse a esta polémica que se dio durante la semana, y para abordar temáticas relacionadas al 8M -que se conmemora el miércoles entrante-, la ex primera dama -con estudios universitarios de antropología, educación y lingüística-, accedió a responder, pero por escrito. De las 19 preguntas del cuestionario enviado, 10 fueron contestadas.
–Sus opiniones en Madrid sobre una «campaña del terror” generaron críticas. Desde la oposición se insistió en que el 4 de septiembre ganó el Rechazo porque la propuesta de la Convención no era buena y por tanto, no convenció al país. Por otro lado, hubo quienes apuntaron a que hay un sector que empuja la versión de la campaña del terror, y que a aquel grupo, le falta autocrítica. ¿Qué opina usted? ¿Le faltó autocrítica en esa afirmación?
– Primero que nada, este es un fragmento de un debate sobre feminismo e institucionalidad política, sobre mujeres en posiciones de poder y también sobre los efectos de las estrategias de la extrema derecha en las mujeres feministas en política. El panel de discusión abordó posiciones diversas y la posición sobre la extrema derecha chilena fue solo un ejemplo ante la pregunta más amplia, no fue resultado de un análisis completo que yo haya hecho sobre el proceso constituyente. Por esto, no formaron parte de mi intervención todos los otros factores que corresponde incluir si la pregunta hubiese sido específicamente sobre el plebiscito. No le quepa duda que en ese caso la autocrítica sobre mi sector sería parte importante. Lo que sí me parece reduccionista, es pensar que un factor automáticamente excluye al otro, esa no fue la dinámica de la ponencia, ni forma parte de mi estilo para opinar sobre temas tan complejos como este.
-Tras las críticas que se generaron, el Presidente señaló: “Es mi compañera, no es una funcionaria pública. Ella tiene derecho a tener las opiniones que mejor le parezcan y en base a las reflexiones que ella haya dado”. ¿Prepararon juntos la respuesta?
-No, no fue necesario prepararla ya que es la verdad.
-La respuesta tras el Rechazo que había dado el Presidente, el gobierno, y que reforzó, por ejemplo, esta semana la ministra Ana Lya Uriarte, se aleja de aquella de la campaña del terror. Su versión pública (la del Presidente) es que hubo errores, que fueron más rápido que el pueblo, y que la propuesta no convenció. Tras todo esto, queda la pregunta: ¿El Presidente cree que ganó el Rechazo por una campaña del terror?
-Respecto de la ministra Uriarte creo que pone énfasis en la parte del análisis que también reproduje en mi ponencia. No veo por qué no hablar abiertamente de los diversos factores y agentes de la política nacional, solo en este caso, incluí la existencia del factor de la ultraderecha en la política chilena, que por cierto se diferencia mucho de la derecha democrática. El resultado del plebiscito demuestra la voluntad del pueblo que es el soberano, eso es, que la propuesta de la nueva Constitución no convenció. Eso no está en cuestión. Lo que no es excluyente de analizar diferentes factores que pueden haber conducido a los resultados, incluyendo aciertos y errores de uno y otro lado. Respecto del Presidente, ya ha dicho lo que cree.
-¿Está consciente de que inevitablemente al ser pareja del Presidente sus opiniones políticas van a ser interpretadas por parte de la población como la postura oficialista y generar contradicciones, como sucedió con la lectura que hizo del 4 de septiembre?
-Soy consciente de que habrá interpretaciones de lo que yo diga y que siempre serán diversas, igual que ahora. Por cierto no hice una lectura acotada al 4 de septiembre, hice un análisis largo respecto de varios temas, además de los efectos que tiene la incidencia de la ultraderecha en la política y la población. No me parece contradictorio sino complementario el que existan diversas perspectivas sobre un proceso complejo como el constituyente. Lo más importante es enfocarnos en el proceso que enfrentaremos ahora.
-¿Cuánto le afectó esta polémica? ¿Cree que fue un error de su parte? ¿Reafirma lo que dijo? ¿Realmente cree que el Rechazo ganó por la campaña del terror?
-Siempre afecta que se amplifique mediáticamente una sola cuña, tiende a distorsionar el debate público para tensionar, pero en vez, pienso que solo hace que la audiencia se distancie de las figuras públicas porque se muestran tan burdas y es aburrido ver tanta supuesta polémica entre políticos. Más encima este encuentro en el que participé era un ejercicio casi opuesto a eso, de pensar y conversar de manera colectiva sobre grandes preguntas actuales que nunca se resuelven en una sola cuña.
Pienso que parte importante de la campaña por el Rechazo difundió información falsa, que eso tuvo una incidencia importante en la votación y que decir eso no es ofender a la población, es simplemente expresar el hecho de que existe ese mecanismo, que está presente hace tiempo en las comunicaciones, que eso nos afecta a todas y todos. No creo que el Rechazo haya ganado unicamente por ello, cómo podría creer eso, son varios factores y no esta nada de mal hablar de los diversos factores que influyen en nuestra política, en la percepción de la verdad y de la información. De hecho, ojalá se hiciera más.
“Me parece importante incluir el cuerpo en la ecuación (política)”
-En El Diario, de España, al referirse al fin del puesto de Primera Dama, habló de la libertad del cuerpo, de la libertad del Presidente y la compañera. Y dijo: “Hay una temática muy interesante que tiene que ver con la libertad de cómo mi cuerpo puede moverse en un espacio en política”. ¿Puede profundizar y explicar aquello?
-Tenemos muy racionalizada la actividad política y me parece importante incluir el cuerpo en la ecuación. No solo en el sentido de que somos seres humanos y las cosas que vemos o hacemos nos afectan, sino también el sentido de que los estereotipos de género también se aplican a la manera en que ocupamos y nos movemos en el espacio político, en un escenario, en reuniones, frente al público, al lado de otros políticos, etc.
Entonces cuando digo que hay que incluir el cuerpo en la ecuación, me refiero a que nos preguntemos quién define el espacio y la forma en que debe performar, liderar y moverse una mujer en política. Tal vez sin darnos cuenta tenemos normalizadas algunas expectativas de cómo las mujeres deberían hablar de manera más suave, estar en segundo plano, resguardar que las señales que se dan sean discretas, etc.
Veo con orgullo que nuestro gobierno ha puesto en disputa estas conductas, comprendiendo que los liderazgos se valoran independiente del género. En el caso especial del imaginario de la primera dama, es más marcado, como si la expectativa sobre ella concentrara toda la mirada más estereotipada y conservadora que se tiene en la respectiva época sobre “la mujer”, “pareja de”, depositando todas las características femeninas en ella y todas las masculinas en él, como un esquema binario y codependiente, donde un presidente necesita una mujer que lo complemente, lo suavice, lo adorne, lo cuide.
-¿Qué caracteriza su liderazgo feminista?
-Construir espacios y debates de manera generosa y horizontal, compartir herramientas que puedan formar nuevos liderazgos, apostar por cambios inclusive desde espacios poco visibilizados, priorizar la acción feminista antes que la política identitaria, para proponer una alternativa para el conjunto de la sociedad por una vida digna, justa, igualitaria.
“Tengo una carrera profesional que pienso retomar este año”
-Sobre su futuro: ¿qué va a hacer? ¿Cómo se quiere posicionar?
-Me parece importante que se normalice que las parejas de los Presidentes o Presidentas cuentan con trayectorias autónomas, que las hacen capaces si así lo desean de desenvolverse profesional y económicamente en paralelo al cambio de vida que por supuesto que implica para ambos esta crucial etapa en la vida política de la pareja. Estaré apoyándolo, militando y trabajando.
-¿Qué rol está jugando? Ya no está en La Moneda, no es primera dama, pero inevitablemente lo que diga/haga está en la opinión pública…
-Claro, soy parte de este proyecto político y pareja del Presidente en un país presidencialista y por lo tanto con exposición pública que el año pasado además incluyó un rol institucional. Ahora no trabajo ni hablo desde la institucionalidad ya que esa parte la desmontamos. Hay otra dimensión más cultural en torno al rol de pareja del Presidente sobre la cual estoy disponible a seguir conversando en algunas instancias de debate y reflexión políticas.
Con Gabriel tenemos una vida privada, tengo un entorno social como cualquier otra persona y soy una ciudadana, además de muchas cosas más, como por ejemplo ser militante feminista, y eso me llevará a participar de diversos proyectos del partido, trabajaré con niñas y jóvenes en materia de participación política, participaré de charlas en universidades y participaré de los voluntariados de INJUV. Además tengo una carrera profesional que pienso retomar este año para lo cual actualmente me estoy postulando a diversos concursos públicos acordes con mi formación y procurando que no se generen conflictos de interés.
-Indudablemente sigue siendo una fiel consejera del Presidente. Se habla de un cambio de gabinete. ¿Conversa con el Presidente de ello?
-A mí ni antes ni ahora me corresponde estar involucrada en estas evaluaciones ni decisiones.
-¿Cómo han sido estos meses fuera de La Moneda? ¿Cómo se ha sentido?
-Cumplir el compromiso que teníamos como gobierno en materia de innovación en probidad, democratización y profesionalización me hace sentir responsable por la tarea realizada en etapas y con un diseño respetuoso que incluyó a todas las partes. Estar fuera de la Moneda es parte del plan cumplido, de no seguir ejerciendo funciones institucionales. Volví el 4 de marzo cuando nos reunimos con las ex primeras damas y ex directoras socioculturales.